Muchos estudios e informes apuntan a que este 2015 será el año del despegue definitivo de los pagos móviles. El mercado quiere ser copado por las grandes corporaciones (entidades financieras, de telefonía, etc.) que ya dominan otros sectores e intentan aplicar tecnologías para cambiar la forma de manejar el dinero o convertir las monedas físicas en digitales. Pero, ¿qué tecnologías emplean las distintas plataformas de pago y envío de dinero a través de dispositivos móviles? Y lo que es más importante, ¿en qué situación quedan los comercios y los consumidores finales?
Tecnología cuyo origen se remonta a 2004, permite conexiones inalámbricas de corto alcance (máximo 20 cm) y tiene diferentes usos. Puede funcionar de dos modos para intercambiar información: activo (dos equipos con chip NFC generan un campo electromagnético) y pasivo (sólo un dispositivo activo y otro aprovecha el campo generado por el primero).
NFC es una plataforma abierta pensada desde el inicio para teléfonos y dispositivos móviles que cada vez está más incorporada en éstos y es usada, entre otros, por los sistemas de pago móvil de Apple (Apple Pay) o Google (Google Wallet). Esta tecnología, de gran usabilidad y velocidad, ha conseguido que actores tan importantes como empresas de telefonía, cadenas de tiendas y bancos o emisores de tarjetas apuesten por ella. Sus puntos negativos en el ámbito del comercio móvil: comisiones en las operaciones y sólo es válida en dispositivos móviles de alta gama.
En la actualidad, esta tecnología también se utiliza -además de en smartphones en tarjetas (contactless), empleadas en servicios y documentos públicos (como el nuevo DNI) y tarjetas virtuales lanzadas por bancos (por ejemplo, La Caixa con Movistar, Orange y Vodafone -esta última también cuenta ya con su propia opción de pago-).
Tipo de pago móvil con éxito entre los usuarios con menor uso de los servicios de entidades financieras. Sin necesidad de éstas, de fácil uso y posible desde teléfonos de baja gama, se trata de una tecnología que permite cargar a la cuenta del teléfono el pago realizado a través de un mensaje de texto. Muy extendido en África, región que ha servido de génesis y motor para los pagos móviles. Las cuotas del proveedor son su principal inconveniente.
Se trata de una criptodivisa de pago peer-to-peer o entre pares. De código abierto, puede ser utilizada en todo el mundo y las transacciones son públicas, directas y sin intermediarios. Eso sí, es una opción experimental, las operaciones no son reembolsables, es una moneda no oficial con precio volátil y está expuesta a muchos ataques informáticos.
Una opción que está creciendo mucho en los últimos tiempos. Se trata de aplicaciones móviles que permiten el envío y recepción de pequeñas cantidades dinero entre personas para, por ejemplo, saldar deudas, crear un bote de ahorro o realizar una compra-venta de escasa cuantía. Square Cash, Venmo, Cashually, Wizzo o Yaap son algunas apps de transferencia a través del móvil que cuentan con el respaldo de muchas entidades financieras. Grandes empresas como Starbucks o Telepizza han creado su propia app de pago con la tecnología que analizamos a continuación.
Tecnología que surge del boicot de los grandes del comercio estadounidense (CVS, 7-Eleven, Old Navy, Wal-Mart o Sears) a Apple Pay (NFC). Está basada en el uso de códigos QR y los pagos se realizan a través de cuentas corrientes y no tarjetas. Por tanto, no se depende entidades financieras y no hay comisiones en cada operación. Además, permite programas de fidelización (cuponing, por ejemplo), es compatible con cualquier smartphone y las tiendas ahorran y tienen control sobre los terminales de pago. Como punto negativo, se trata de un sistema aún en desarrollo y algo más laborioso (escanear el código, introducir contraseña y enseñar el dispositivo) en su ejecución que otros.
Momo Pocket facilita los pagos P2P, gestiona los programas de fidelización para comercios, permite el envío y recepción de dinero entre usuarios, utiliza actualmente la tecnología QR (CurrentC) y en un breve plazo también NFC y aporta valor a comerciantes y usuarios a través de un sistema de pago móvil seguro y sencillo que promueve el ahorro y abarata costes (app gratuita y con comisiones más bajas para comercios en las transacciones). En definitiva, una solución innovadora que ofrece beneficios a todos los actores implicados en el proceso de compra.